El día de muertos en el México actual en una oportunidad para reencontrarse con sus seres queridos que ya no están aquí en un altar hecho en casa o en un cementerio entre el colorido de flores, aroma, música y comida.
Para el prehispánico la muerte no representaba un castigo o perdón en el más allá-es una percepción europea del infierno y paraíso- ellos creían que las almas iban a un lugar determinado para ser honrados por el tipo de muerte encontrado y no por su comportamiento.
Los altares tienen muchos elementos con significados fusionados del cristianismo y del precolombino y estos son para honrar al ser amado que partió “al más allá” y se encuentra enterrado muy lejos o no se sabe el lugar de su descanso.
Las calaveras de azúcar estas tienen grabado el nombre del difunto.
El pan de muerto representa a la eucaristía y fue agregado por el europeo.
El cempasúchil es la flor que representa el camino y guía de las almas de los muertos.
El retrato del finado es para el alma que nos visitará, el podrá vernos a través de la fotografía y así contarle nuestras cosas que ya no pudo ver.
Cirios, agua y sal estos son para encontrar el camino a casa.
La Cruz fue agregada por los evangelizadores españoles representa la fe.
Papel picado esta hecho en papel china perforado a mano y representa la alegría de la festividad.
Los alimentos son los que le gustaban al muerto en vida.
El agua se coloca en un vaso es para mitigar la sed del viajante del inframundo al mundo de los vivos.
Bebida alcohólica generalmente era del gusto del desaparecido puede ser tequila, mezcal, sotol, cerveza o pulque.
Copal e incienso es un elemento prehispánico limpia la energía del lugar y ambiente.
José Guadalupe Posada fue un caricaturista que hacia su crítica con grabados de calaveras y estas representaban la perspectiva del mexicano que no le tiene miedo a la muerte sino a la angustia de la vida, una de las más famosas es “la catrina” originalmente llamada “la Calavera Garbancera”, el dibujo representa la burla de los mestizos que se enriquecieron durante el Porfiriato y despreciaban sus orígenes y costumbres adoptando modas europeas.
La mujer mexicana tiende a maquillarse de catrina para la celebración del día 2 de noviembre, esto provocó que en otros países ya están imitando esta costumbre debido a la genialidad del atuendo por lo que la Unesco distinguió a la festividad indígena de Día de Muertos el 7 de noviembre de 2003 como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
En los cementerios puede verse a personas limpiando lapidas, colocando flores o coronas de papel, ensimismados con un dialogo mudo con el que yace en la tumba, aferrándose al recuerdo del ser amado.
Con información y video: Luis Torres.