03-diciembre-2018
Indocumentados se entregaron a los agentes de la Border Patrol a lo largo de la línea fronteriza desde la colonia Felipe Ángeles hasta el punto 36 donde se concentró la mayor parte del contingente.
Aproximadamente 140 personas permanecieron sentados frente al muro metálico mientras los elementos de la patrulla fronteriza los resguardaban con tres unidades.
Entre el grupo de migrantes se encontraban hombres, mujeres e infantes quienes se mantuvieron en el mismo lugar desde las 9:00 am hasta las 14:00 horas.
Los guardianes permitieron a los detenidos realizar sus necesidades fisiológicas en un lugar cercano en unos matorrales, ya que esperaron cinco horas a que llegara el vehículo para su traslado a un centro de detención.
Un agente abrió la puerta del muro a la llegada del autobús mientras los centroamericanos pasaron en fila para abordarlo.
Los inmigrantes llegaron durante la madrugada a orillas del río
las aguas frías por el clima invernal en busca del sueño americano.